Pura
materia enloquecida de azar, eso, pensaba Qüity, es la vida. En El Poso, uno
de esos pequeños Auschwitz en que se habían convertido las villas en Buenos
Aires, la hermana Cleopatra, una travesti que dice comunicarse con la Virgen,
predica rodeada por una corte de chongos, putas, nenes y otras travestis.
Qüity la vio por primera vez en los videos de las cámaras que vigilaban la
villa. La vio bella, la escuchó elocuente: había que organizar la villa,
sacar a los pibes del paco, a las pibas de la calle, y la Virgen les diría
cómo.
Con una lírica sobrecogedora y un estilo absolutamente personal para
abordar el lenguaje coloquial, Gabriela Cabezón Cámara pasa con inteligencia
de la tragedia a la comedia; de la nostalgia, el dolor y el odio, al vértigo
y el frenesí de la cumbia, las plegarias, el alcohol y el sexo. Sin dudas,
una revelación para la narrativa argentina y latinoamericana actual.